La batmofobia, o el miedo a las pendientes o escaleras, es una fobia algo complicada . Es bastante similar a la climacofobia , o el miedo a subir escaleras, excepto en su enfoque específico. Si tiene batmofobia, puede entrar en pánico simplemente al observar una pendiente pronunciada, mientras que las personas con climacofobia suelen experimentar síntomas solo cuando se espera que realmente asciendan o desciendan. La diferencia es sutil pero importante y solo puede ser diagnosticada con precisión por un médico capacitado.

La batmofobia se puede observar tanto en niños como en adultos. También es bastante común entre los animales, particularmente las mascotas domésticas. Los perros entrenados como animales de servicio pueden ser rechazados por miedo a las escaleras. 

Si su hijo tiene miedo a las escaleras o pendientes, tenga en cuenta que los miedos son una parte normal del desarrollo. La batmofobia, al igual que con otras fobias, generalmente no se diagnostica en niños o adultos a menos que persista durante más de seis meses. 

Causas

La batmofobia puede deberse a una amplia gama de factores. Una causa particularmente común es una experiencia negativa temprana con escaleras o una colina empinada. Si se resbaló o cayó en escaleras empinadas o vio a otra persona luchar con dificultad para respirar mientras sube, puede tener un mayor riesgo de desarrollar batmofobia.

Particularmente en los niños, la batmofobia también se puede desencadenar al negociar o incluso simplemente contemplar un conjunto de escaleras de aspecto particularmente aterrador. Un ejemplo es un niño involucrado en un teatro comunitario local con escaleras que conducen al desván de disfraces entre bastidores. Las escaleras eran empinadas y abiertas en la parte de atrás para que pudieras ver hacia abajo mientras las subías, y la niña podía imaginarse deslizándose por ellas, aunque ella nunca las subió.

Los recuerdos de esas escaleras se convirtieron en sueños que incluían luchar por cruzar un piso inclinado que se inclinaba casi a la vertical a medida que se acercaba a su destino en los sueños. Continúa sintiendo aprensión cuando se enfrenta a un piso inclinado o un tramo de escaleras complicadas.

Además de la climacofobia antes mencionada, la batmofobia puede estar relacionada con otros trastornos. La acrofobia , o el miedo a las alturas, es excepcionalmente común. Lo que parece ser un miedo a las escaleras puede, de hecho, ser un miedo a la altura que alcanzan las escaleras. La ilignofobia , o el miedo al vértigo, también puede provocar síntomas similares a los de la batmofobia.

También se deben considerar las causas médicas. El vértigo verdadero es un trastorno médico del sistema del equilibrio que provoca una sensación de mareo o de que dan vueltas. El término también se aplica médicamente a síntomas similares que no son causados ​​por un trastorno del equilibrio. Ambos tipos pueden empeorar incluso con cambios menores en la altura. Por definición, un miedo que es razonable debido a una condición médica existente no puede llamarse fobia.

Si tiene vértigo médico, el temor de que las escaleras y las pendientes puedan desencadenar sus síntomas no significa que también tenga batmofobia.

Tratamiento

Si su médico determina que sus síntomas son causados ​​por la batmofobia, es probable que reciba terapia cognitivo-conductual  (TCC).  El objetivo de este tipo de terapia es ayudarlo a reemplazar sus pensamientos y comportamientos atemorizantes con alternativas más racionales. Se le enseñarán ejercicios de relajación para ayudarlo a mantener la calma y se le presentará lentamente el objeto de su miedo a través de un proceso conocido como desensibilización sistemática .

Aunque lleva tiempo, la terapia tiene una excelente tasa de éxito en el tratamiento de este tipo de fobia. Elegir un terapeuta en el que confíe es un componente esencial para superar su miedo.